Es hora de definir y diseñar una zona concreta para que puedas teletrabajar de manera cómoda y eficiente: estos consejos te darán las claves para crear la oficina en casa perfecta.
Dada la reciente situación provocada por la enfermedad COVID-19, ocasionada por el coronavirus, hay cada vez más empresas que se vieron obligadas a trabajar desde casa, ya sea por distanciamiento o por que la situación económica no les permitió seguir con su empresa físicamente y decidieron prestar servicios de forma virtual.
La recientemente pandemia por este tipo de coronavirus va a poner sobre la mesa los beneficios del trabajo remoto. Sin dudas, la COVID-19 ha dado un empujón a su implementación.
A simple vista, trabajar remoto parece ser una opción más cómoda para cualquier trabajador. Pero existe una infinidad de contratiempos, distracciones e interrupciones que pueden afectar drásticamente su productividad e incluso cualquier proceso creativo.
A continuación, te listamos unas simples recomendaciones para mantener un ambiente que no afecte tu desempeño con tu empresa, si eres de los que trabajará desde casa:
Pero para trabajar en casa, hay que tener un espacio de trabajo adecuado. Un espacio agradable, funcional, en el que estemos a gusto para pasar horas, horas y más horas dándole a la tecla. Si eres autónomo o freelance, o si quieres montarte una pequeña oficina allí para completar a la que ya tienes en la oficina, aquí tienes una serie de consejos para conseguir un rincón de trabajo en casa de primera
1. Define un lugar de trabajo concreto
Si vamos a pasar muchas horas al día trabajando en este espacio, tendremos que diseñarlo para conseguir una atmósfera agradable que nos ayude a concentrarnos.
2. Elige un espacio con luz natural
Algo muy simple y obvio, pero que a veces por la distribución de los espacios o la orientación de las viviendas no siempre es posible, es procurar que el puesto de trabajo se encuentre cerca de una ventana que deje pasar la luz natural, o por lo menos, contar con una buena iluminación artificial, mejor difusa y colocada en una buena posición para evitar reflejos en la pantalla para no forzar la vista.
3. Escoge bien el mobiliario
El mobiliario es uno de los puntos que más debemos cuidar a la hora de diseñar nuestro espacio de trabajo en casa. La mesa debe ser funcional y adecuada al espacio, la silla debe ser cómoda… y sobre todo, si el rincón de trabajo comparte espacio con el salón o con el dormitorio, hay que buscar muebles que se integren en el ambiente, o incluso que puedan reconvertirse para que desaparezcan visualmente cuando no estén en uso.
La ergonomía, muy importante:
una buena mesa y una buena silla son imprescindibles. Si puedes, elige una mesa en función del uso que hagas del ordenador, teniendo en cuenta si vas a pasar mucho tiempo frente a él, hablar por teléfono o hacer muchas anotaciones.
¿La silla? Se recomienda un modelo ergonómico regulable en altura, cuyo respaldo se adapte a la espalda, que sea ancha para proteger tu zona lumbar y tenga un buen reposabrazos. Una base de ruedas también ayudará a moverla fácilmente y evitar lesiones y la recarga muscular.
4. Mantén tu espacio bien organizado.
El orden es fundamental para trabajar en buenas condiciones y que fluya la concentración y la creatividad. Tómate el tiempo necesario para organizar tu espacio de trabajo de manera que te ayude a mantenerte concentrada y ayúdate de elementos que permitan el almacenaje y la clasificación de tu material y documentos de forma sencilla e invisible: archivadores, organizadores, tableros y moodboards para colgar imágenes inspiradoras, notas y fotos, de tal manera que decoren el espacio a tu gusto, definiendo en él tu estilo y personalidad. También puedes colocar objetos y elementos decorativos que te traigan buenos recuerdos y te llenen de energía positiva.